La incapacidad permanente es un término que se utiliza para definir la situación en la que una persona queda incapacitada para trabajar de manera permanente debido a una enfermedad o lesión. Esto implica que la persona no puede realizar las actividades laborales que realizaba anteriormente o cualquier otra actividad que le permita ganarse la vida de manera efectiva.
¿Qué es la incapacidad permanente total?
La incapacidad permanente total se refiere a la situación en la que una persona no puede realizar ninguna actividad laboral de manera efectiva debido a una enfermedad o lesión. Esto implica que la persona no puede realizar las actividades laborales que realizaba anteriormente o cualquier otra actividad que le permita ganarse la vida de manera efectiva.
La incapacidad permanente total puede ser debida a una enfermedad o lesión que afecte a la capacidad física o mental de la persona. Algunos ejemplos de enfermedades o lesiones que pueden causar una incapacidad permanente total son:
– Enfermedades crónicas como la artritis, la diabetes o el cáncer.
– Lesiones graves de la columna vertebral o el cerebro.
– Enfermedades mentales como la depresión, la ansiedad o la esquizofrenia.
¿Qué es la incapacidad permanente parcial?
La incapacidad permanente parcial se refiere a la situación en la que una persona sufre una disminución permanente de su capacidad laboral debido a una enfermedad o lesión. Esto implica que la persona puede realizar algunas actividades laborales, pero no puede realizar todas las actividades que realizaba anteriormente.
La incapacidad permanente parcial puede ser debida a una enfermedad o lesión que afecte a la capacidad física o mental de la persona. Algunos ejemplos de enfermedades o lesiones que pueden causar una incapacidad permanente parcial son:
– Lesiones en las extremidades que afecten la movilidad o la fuerza.
– Enfermedades que afecten la capacidad pulmonar o cardiaca.
– Lesiones cerebrales que afecten la capacidad cognitiva.
¿Cómo se calcula la pensión por incapacidad permanente?
La pensión por incapacidad permanente se calcula en función de la base reguladora del trabajador y el porcentaje de incapacidad permanente que se le haya concedido. La base reguladora es la media de las cotizaciones del trabajador en los últimos años, mientras que el porcentaje de incapacidad permanente se establece en función del grado de incapacidad que tenga el trabajador.
El grado de incapacidad permanente puede ser del 33%, del 50% o del 66%, dependiendo de la capacidad laboral que tenga el trabajador. En función del grado de incapacidad permanente, se establece el porcentaje que se aplicará a la base reguladora para calcular la pensión por incapacidad permanente.
¿Qué requisitos se necesitan para solicitar la incapacidad permanente?
Para solicitar la incapacidad permanente, es necesario cumplir algunos requisitos. En primer lugar, es necesario estar afiliado a la Seguridad Social y haber cotizado un mínimo de 1.800 días en los últimos 10 años. En segundo lugar, es necesario que la persona tenga una enfermedad o lesión que le impida realizar su trabajo de manera efectiva.
Para solicitar la incapacidad permanente, es necesario presentar un informe médico que acredite la enfermedad o lesión que tiene la persona y su grado de incapacidad. Este informe debe ser emitido por un médico especialista en la materia y debe incluir todos los datos necesarios para evaluar la capacidad laboral de la persona.
En resumen, la incapacidad permanente es una situación en la que una persona queda incapacitada para trabajar de manera permanente debido a una enfermedad o lesión. Esta situación puede ser total o parcial y se calcula en función de la base reguladora del trabajador y el porcentaje de incapacidad permanente que se le haya concedido. Para solicitar la incapacidad permanente, es necesario cumplir algunos requisitos y presentar un informe médico que acredite la enfermedad o lesión que tiene la persona y su grado de incapacidad.