El frigorífico es uno de los electrodomésticos que más energía consume en una casa. Por eso, es importante tomar medidas para reducir su consumo y, por tanto, el gasto en la factura de la luz. Aquí te presentamos algunos trucos para que tu frigorífico gaste menos.
¿Cómo colocar los alimentos en el frigorífico?
La organización de los alimentos dentro del frigorífico es clave para reducir su consumo energético. Es importante dejar espacio suficiente entre los alimentos para que el aire circule mejor y el frigorífico no tenga que trabajar tanto para mantenerlos frescos.
Además, es recomendable colocar los alimentos más pesados en la parte inferior del frigorífico, ya que el aire frío tiende a acumularse en la parte baja. Los alimentos más ligeros, como las frutas y verduras, se deben colocar en los cajones especiales para que se conserven mejor y no se mezclen los olores.
¿Cómo regular la temperatura del frigorífico?
Otro factor a tener en cuenta para reducir el consumo energético del frigorífico es la temperatura a la que se encuentra. Lo ideal es que esté entre 3 y 5 grados Celsius en el compartimento de refrigeración y entre -18 y -15 grados Celsius en el congelador.
Es importante no regular la temperatura demasiado baja, ya que esto hace que el frigorífico tenga que trabajar más para mantenerla constante. Además, es recomendable no abrir la puerta del frigorífico más de lo necesario, ya que cada vez que lo hacemos, se pierde una gran cantidad de frío y el frigorífico tiene que trabajar más para recuperarlo.
¿Cómo limpiar el frigorífico?
La limpieza del frigorífico es fundamental para que funcione correctamente y, por tanto, para reducir su consumo energético.
Se recomienda limpiarlo al menos una vez al mes, utilizando un paño húmedo y un detergente suave.
Es importante retirar todos los alimentos del frigorífico antes de limpiarlo y prestar especial atención a las juntas de las puertas, que suelen acumular suciedad y restos de comida. También se recomienda descongelar el congelador cada cierto tiempo, para evitar que se acumule hielo y el frigorífico tenga que trabajar más para mantener la temperatura adecuada.
¿Cómo elegir un frigorífico eficiente?
Si estás pensando en comprar un frigorífico nuevo, es importante elegir uno que sea eficiente energéticamente. Para ello, debes fijarte en la etiqueta energética, que indica el consumo anual de energía del electrodoméstico y su eficiencia.
Lo ideal es elegir un frigorífico de clase A++ o superior, que son los más eficientes y consumen hasta un 40% menos de energía que los de clase A. Además, es recomendable elegir un frigorífico con función de descongelación automática, que reduce su consumo energético y evita la acumulación de hielo en el congelador.
En definitiva, para reducir el consumo energético de tu frigorífico y ahorrar en la factura de la luz, es importante:
- Colocar los alimentos de manera adecuada y dejar espacio suficiente entre ellos.
- Regular la temperatura del frigorífico de manera adecuada y evitar abrir la puerta más de lo necesario.
- Limpiar el frigorífico con regularidad y prestar atención a las juntas de las puertas y al congelador.
- Elegir un frigorífico eficiente energéticamente, de clase A++ o superior y con función de descongelación automática.